Durante tres días consecutivos, el artista ha capturado la atención de sus seguidores en Instagram con sus obras protagonizadas por animales, como simios, elefantes y una cabra montés, siendo esta la primera pintura de su proyecto.
El bóvido pintado en el barrio de Kew Green, en Richmond, al suroeste de la capital británica, aparece sobre una cornisa desde la que se desprenden varias rocas.
A esta especie, también denominada íbice ibérico, le suceden dos elefantes asomando la cabeza y mirándose entre sí a través de dos ventanas tapiadas de un edificio del barrio londinense de Chelsea.
La tercera obra es la de tres monos colgados de una repisa en el puente de la estación del metro de Shoreditch High Street, y sobre una tienda vintage y una cafetería.
El modus operandi de Banksy es el mismo desde que comenzó como grafitero; además de mantener oculta su identidad, a la hora de publicar sus obras sube una fotografía para confirmar su autoría y el resto lo deja a la imaginación de sus más de 12 millones de seguidores.(Prensa Latina)