En realidad, fue al filo de la medianoche anterior cuando oficialmente terminó el plazo para la inscripción de aspirantes a integrar el Congreso de los Diputados, esencial para determinar al futuro presidente del Gobierno.
Se trata de una elección indirecta, en la cual la mayoría parlamentaria en las Cortes Generales decidirá a la figura que ocupará el sillón principal del Palacio de la Moncloa durante los próximos cuatro años, salvo que se imponga una moción de censura.
En tal caso, la figura del líder del PP, el gallego Alberto Núñez Feijóo, emerge como el aspirante a sustituir al socialista Pedro Sánchez, quien, sin embargo, está lejos de rendirse en su empeño de revalidar el puesto.
Por lo pronto, el PP dominó las tomas de posesión en 31 capitales de provincia españolas el pasado domingo, con la reiteración de la idea de su propósito de “acabar con el sanchismo” y tratando de mostrarse distante de ciertas ideas de la ultraderecha de Vox.
Empero, con Vox ya pactaron gobierno en la Comunitat de Valencia, luego de negociar con un dirigente que debió cumplir en el pasado condena por violencia machista.
Si bien el tema ocupó el centro de las críticas de la izquierda al PP, los conservadores se defienden atacando, en particular acerca de los acuerdos durante la actual magistratura de Sánchez y su equipo con el partido EH Bildu del País Vasco, asociado con su antiguo brazo armado de ETA, y con los independentistas catalanes.
Tampoco la solidez del movimiento Sumar, que encabeza la actual vicepresidenta segunda y ministra del Trabajo, Yolanda Díaz, acaba de convencer, debido a que dejó fuera de sus listas a dos pesos pesados del izquierdista partido Podemos, la actual ministra de Igualdad, Irene Montero, y el portavoz parlamentario, Pablo Echenique.
Oficialmente, la campaña electoral comienza el próximo 7 de julio, pero desde ya salieron al ruedo dos personalidades, los exjefes del gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero (socialista) y José María Aznar (PP).
En particular, fue muy destacada la intervención de Zapatero durante una entrevista con TVE, en la cual fue categórico: «Discutir sobre la violencia de género es como discutir si la Tierra es plana».
«Me parece lamentable que estemos discutiendo sobre la violencia de género. Ahora, 20 años después. ¿Queremos volver a aquellas décadas donde ni se hablaba de que había hombres que mataban a las mujeres por afán de dominación, por discriminación histórica, que es lo que es la violencia de género. No hay ideología», sentenció.(Prensa Latina)