Carlos III se convirtió automáticamente en rey a la muerte de su madre, la reina Isabel II, el 8 de septiembre pasado, pero la coronación se celebra tradicionalmente meses después de la ascensión al trono del nuevo monarca, para dar tiempo a preparar un evento lleno de pompa y boato.
Se cree, sin embargo, que el soberano, de 74 años, optará por una ceremonia más sencilla y de menor duración que las anteriores, en un intento de insuflar un poco de modernidad a la monarquía.
De acuerdo con la edición dominical del tabloide The Mail, que citó una fuente anónima de la casa real, a la coronación de Carlos III asistirán unos dos mil invitados, en lugar de los ocho mil que estuvieron en la celebrada por Isabel II en 1953, y durará menos de una hora, y no tres.