Incendio en Matanzas no contaminó las presas ni la bahía

Oscar García Martínez, delegado del Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente (Citma) en Matanzas, afirmó que no existe evidencia de lluvias ácidas, contaminación de las presas o de la bahía como consecuencia del reciente incendio en la base de supertanqueros.

En diálogo con la prensa el también máster en ciencias aclaró que, según estudios en el terreno, los niveles de gases por la quema de combustible durante el siniestro no alcanzaron concentraciones lo suficientemente elevadas como para producir esa clase de precipitación.

Si cayó lluvia ácida en algún punto debió tratarse de un evento sumamente raro, pero hasta la fecha no tenemos prueba alguna de que ocurriera, comentó el investigador, quien añadió que desde el principio se activó una red de 16 enlaces para monitorear la calidad del aire y otros parámetros perceptibles.

El delegado significó que, ante reportes de la población en escenarios como el Valle del Yumurí, se constató la presencia de agua ennegrecida por la cantidad de partículas en suspensión, debido a la densa columna de humo generada por los tanques de combustible en llamas, aunque sin consecuencias para la salud de personas y animales.

Destacó que al tercer día del siniestro se tomaron muestras de agua de lluvia (pluviómetros del Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos), hortalizas, vegetación, pastos y suelos, hoy en proceso de un análisis cuyos resultados se conocerán en las próximas semanas.

García Martínez aseveró que ni las presas ni las aguas subterráneas en el entorno de la provincia presentan indicios de contaminación como resultado de la tragedia de la base de supertanqueros, donde se desató el fuego por el impacto de un rayo el día 5 último y el 12 se logró extinguir.

El experto confirmó a la Agencia Cubana de Noticias que las barreras construidas en tierra para contener el petróleo derramado resultaron efectivas, más aún al tratarse del crudo nacional por ser muy viscoso, y no llegó a derramarse en la amplia bahía de importancia ambiental y socioeconómica.

Lo sucedido en la zona industrial generó un gran volumen de desechos y recogerlo todo demorará algún tiempo, Cupet cuenta con unas piscinas especiales para almacenar y tratar ese producto mediante biorremediación, indicó.

Tras el accidente tecnológico de origen natural equipos especializados monitorean con moderno equipamiento la calidad del aire, para identificar concentraciones de orgánicos volátiles, material particulado, dióxido de carbono y dióxido de nitrógeno en las provincias occidentales de Cuba.

En diversas ocasiones, autoridades del Citma y el Ministerio de Salud Pública (Minsap) reiteraron que el denso penacho de gases generado por el incendio no provocó un incremento de padecimientos respiratorios u otros en la población, afirmación basada en la actividad de los cuerpos de guardia de los centros asistenciales.