El salto en los casos de Covid-19 obliga al metro de Nueva York a cortar sus recorridos debido a la escasez de personal, contagiado o aislado por contactos cercanos, y también hay una sensible baja en la frecuencia de los trenes.
De hecho, la Autoridad Metropolitana de Transporte (MTA) advirtió sobre una reducción significativa en los viajes al menos hasta el jueves.
“Como todos en Nueva York, nosotros también nos hemos visto afectados por el aumento de casos de Covid”, tuiteó la MTA, esperando que la reducción ayude a mantener a sus empleados seguros y saludables.
Por eso advirtió a los pasajeros: “revisen los horarios y cronogramas con frecuencia, de lo contrario corren el riesgo de esperas prolongadas e infinitas”.
“A menudo decimos, estamos ejecutando todo el servicio que podemos con las tripulaciones que tenemos disponibles, y lo decimos en serio. Nuestro objetivo es mantener a Nueva York en movimiento, de manera segura y eficiente”, agregó la MTA.
“Estamos tomando estos pasos proactivos para brindar el mejor servicio posible esta semana y mantener seguros a nuestros empleados”, señaló luego.
La MTA también resaltó que está trabajando para implementar las pautas de cuarentena revisadas del estado de Nueva York para los trabajadores esenciales, lo que ayudará con la escasez de personal.
Solo el 24 de diciembre, se registraron 49.708 nuevos casos de Covid en el estado de Nueva York, un nuevo récord. El 25 de diciembre se registraron 36.454.
El periódico The New York Times señaló antes de la Navidad que los estadounidenses “están hartos y cansados de estar hartos y cansados, de rehacer los planes para adaptarse a los últimos riesgos del virus; de buscar pruebas caseras y no encontrarlas; de preguntarse si, después de dos años de esquivar al Covid-19, de sobrevivir a la enfermedad o de vacunarse, e incluso de recibir el refuerzo, la variante Omicron es la que inevitablemente contraerán”.
“La sensación de temor ante la rápida propagación de Omicron -la más rápida de todas las variantes hasta ahora- ha invadido el noreste y la parte norte del Medio Oeste, que ya estaban inundados de casos y hospitalizaciones de la variante delta”, acotó el diario.
Y señaló que el malestar ha crecido incluso en estados y territorios como Florida, Hawái y Puerto Rico, que habían superado un terrible verano a causa de la variante Delta y, hasta hace poco, experimentaban una relativa calma del virus.
El presidente Joe Biden respondió días atrás a esas sensaciones de los ciudadanos. “Sé que están cansados. Sé que están frustrados”, dijo.
Pero el mandatario destacó que las herramientas disponibles para prevenir, diagnosticar y tratar el Covid son mucho más abundantes ahora que en los primeros días de la pandemia. “Todos deberíamos estar preocupados por la variante Omicron, pero sin sentir pánico. No estamos en marzo de 2020”, afirmó Biden.(Portal Cuba Sí)