El oficio de costurera es una labor que combina habilidad, creatividad y precisión para transforman telas en prendas únicas, adaptadas a las necesidades y gustos de cada cliente.

Este trabajo requiere destreza manual y conocimiento sobre los diferentes tipos de tejidos y técnicas de confección.

La costurera se convierte en la heroína silenciosa de la comunidad. Su habilidad para arreglar los uniformes de los estudiantes asegura que cada niño luzca impecable y listo para aprender.

La costurera Vania Martínez perteneciente al Municipio de Perico declaró que ha podido ayudar en la realización de los artículos de la canastilla, confeccionar cortinas, manteles, delantales y los elementos empleados por los niños de la enseñanza primaria.

Además comparte sus conocimientos a quienes piden su ayuda para efectuar alguna tarea o simplemente para aprender a coser.

Su labor no solo embellece  también crea confianza y felicidad en quienes visten sus creaciones. En cada puntada, se teje una historia de dedicación y amor por el arte.

El trabajo de las costureras tiene gran importancia en la comunidad por su impacto positivo en las personas al realizar ajustes, reparaciones y personalizaciones de las prendas de vestir