

Yunaisy Casañola Naranjo, directora de la institución, explicó que el inmueble se encontraba muy deteriorado, por lo que el Mined sometió todas sus áreas a un proceso constructivo a partir de 2020.
«La obra permitió la ampliación de dos salones con mejores condiciones, la construcción de baños nuevos, una cocina y una lavandería, pues esta última había colapsado. De igual forma, los almacenes y la dirección ganaron en espacio», detalló Yunaisy.

Hoy acoge a 86 pequeños que vuelven a encontrarse con alegría, después de dos años ubicados en otros círculos infantiles para no interrumpir el proceso educativo durante la pandemia.
Mientras observa de lejos a Karol jugando con la seño, la joven madre Claudia Peña Delisle agradece la transformación de este espacio, donde su hija puede socializar y aprender en un ambiente seguro y lleno de amor.
«También este centro me queda más cerca de la casa y del punto de recogida del trabajo. Al quedar al cuidado de las seños tengo tiempo para mi desarrollo profesional», comentó Claudia.

Para Yunaisy el reto es elevar la calidad del proceso educativo, y cuidar el círculo que tiene un impacto directo en la comunidad, beneficia a muchos padres y madres trabajadores.
«Aquí los infantes dan sus primeros pasos en el aprendizaje. No por ser la primera enseñanza es la menos importante. El menor comienza a andar por sí mismo con nuestra ayuda y adquiere nuevos conocimientos. El objetivo es lograr el máximo desarrollo posible hasta los 6 años», agregó.


Tres consultorios del médico y la enfermera de la familia también fueron reinaugurados en Pueblo Nuevo Norte, donde se reestructuraron las consultas para mejorar el servicio al pueblo.

(Por Anet Martínez Suárez — Periódico Girón)
Fotos: De la autora